Mensajes del día
Mensaje del día 24 de Septiembre del 2021
La humanidad puede ganarse la felicidad solo mediante la unidad, no a través de la diversidad. Si los pensamientos y sentimientos van por las rutas de la diferencia y la división, la felicidad queda fuera de alcance, y la paz no puede experimentarse. Sin paz, no tienen ninguna posibilidad de tener alegría. Consideren como su meta el océano, indivisible y uno. ¿Qué importa en qué dirección fluye el río? ¿Qué importa el nombre? Los ríos se funden en el mismo mar, ¿no es así? Los aspirantes espirituales y devotos que adoptan el camino del yoga, el camino de la devoción o el camino de la paz, el dharma, la verdad y el amor, llegan finalmente al océano de gracia, y el nombre y la forma se desvanecen; las diferencias desaparecen. Ellos son bendecidos con la fusión en el mar de la paz. Por eso, la unidad debe mantenerse siempre ante la vista. Nunca alimenten ideas de diferencia, de nombres y formas diferentes para el Señor, ni caminos diferentes. Tales ideas son obstáculos para alcanzar la bienaventuranza. Eviten esos obstáculos; desarrollen una visión igualitaria. (Prasanthi Vahini, Capítulo 14)
Mensaje del día 23 de Septiembre del 2021
Los beneficios mundanos vienen y van. No son las cosas por las que deberían orar. Busquen lo eterno. Oren por el amor y la bienaventuranza de Dios. Busquen realizar su Divinidad. Entonces, experimentarán lo Divino en todo el cosmos. Experimentarán la bienaventuranza que llena el universo. Cuando vean el mundo con los ojos de la bienaventuranza divina, hallarán bienaventuranza en todas partes. Si hay odio en su visión, verán odio en todas partes. Por lo tanto, para empezar, cambien su visión. Miren al mundo con la visión de la paz, el amor y la compasión. Entonces el mundo entero les parecerá amoroso y pacífico. Cuando su corazón esté lleno de amor, experimentarán lo Divino en todo el cosmos. Vean lo Divino en todos. Eviten el odio y la mala voluntad. Luego de años de devoción, muchos aún carecen de un punto de vista amplio y un amor que todo lo abarque. ¡Encarnaciones del amor: cultiven incesantemente el amor en sus corazones, el amor que es inmortal e infinito! Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Discurso Divino del 7 de abril de 1997)
Mensaje del día 22 de Septiembre del 2021
Apéguense al Atma en ustedes; descansen y refúgiense en Eso y mediten en Eso sin interrupción. Luego, todas las ataduras se soltarán por sí mismas ya que el lazo con el que se apegan al Señor o al Atma tiene el poder de desatar todas las demás ataduras. Los "desapegados" tienen amor verdadero hacia todo. Su amor no solo es puro, también es divino. Es la encarnación de la paz. Sin duda, uno puede alcanzar al Señor si se despoja de toda pasión o apego (raga) y se compromete con las acciones detalladas anteriormente. Por supuesto, la renuncia o el desapego (vairagya) no significa la renuncia al hogar, a posiciones elevadas e incluso a reinos. Es la comprensión de la divinidad inmanente en todo, el desvanecimiento de todos los nombres y formas distintas, y la bienaventuranza de experimentar en cada cosa y en todo lugar a la Divinidad, que es su realidad. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Prasanthi Vahini, capítulo 13 de la edición en inglés y capítulo 4 de la edición en español)
Mensaje del día 21 de Septiembre del 2021
¡A partir de hoy traten de limpiar el corazón de cualquier impureza que pueda haber en él! ¿Cómo ha de hacerse esto? Primero, meditando en Dios. En segundo lugar, mediante el servicio a la sociedad. Solo por estos dos medios se logra la pureza de corazón. Si obtienen el amor de Dios, podrán lograr cualquier cosa. Hay amor en ustedes. Úsenlo para ganar el amor de Dios. Oren por el amor y la bienaventuranza de Dios. ¡Encarnaciones del Amor!: muchos le rezan a Dios en todo el mundo. Rezan para que se cumplan sus deseos mundanos de diferentes tipos. Esta no es la clase correcta de oración. Deberían rezarle a Dios por la gracia de Su amor. Ese amor es eterno e infinito. Dios posee otro atributo. Él es la encarnación de la bienaventuranza. Él es Sat-Chit-Ananda (Ser-Conciencia-Bienaventuranza). Oren a Dios para que les confiera esa bienaventuranza. La bienaventuranza de Dios es ilimitada y eterna. Todos los placeres mundanos son transitorios y efímeros. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Discurso Divino del 7 de abril de 1997)
Mensaje del día 20 de Septiembre del 2021
Para descubrir la presencia de lo Divino omnipresente en todo en el universo, debemos reconocer lo Divino en nuestra vida cotidiana. Al igual que el poder de la vista en el ojo y el poder de la audición en los oídos, Dios se manifiesta como conciencia en el cuerpo humano. No hay lugar en el mundo en el que Dios no exista. La creación es una manifestación de Dios. Es la forma de Dios llamada Prakruti (Naturaleza). Por lo tanto, el hombre, que es hijo de la Naturaleza, es inherentemente Divino. El hombre nace con cualidades divinas. Así como el retoño crece de la semilla, la flor del retoño y el fruto de la flor, Dios es la semilla de todo el cosmos. El hombre es intrínsecamente una combinación de moralidad, rectitud y espiritualidad. Desgraciadamente, olvidando estas cualidades básicas, hoy el hombre carece de moralidad, rectitud y espiritualidad. Considerando el carácter sagrado del nacimiento humano, es una vergüenza que el hombre hoy en día esté tan degradado. ¡El hombre es una encarnación de Sat-Chit-Aananda (Ser-Conciencia y Bienaventuranza) que son atributos de lo Divino! Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Discurso Divino del 7 de abril de 1997)
Mensaje del día 19 de Septiembre del 2021
La liberación es el samadhi o la paz que se alcanza a través de la disciplina espiritual que consiste en la limpieza de la persona interior; la disciplina espiritual de negar las impresiones que uno obtiene a través de la vista, el oído, la lectura, el aprendizaje, la acción y el logro de cosas. Las personas que sufren una agonía física insoportable no sienten interés por el entretenimiento, ¿verdad? Del mismo modo, un buscador y devoto sincero no puede tener ningún interés por el teatro de placeres objetivos y pasiones mezquinas que es el mundo. Primero hay que renunciar a estos deseos inferiores y controlarlos ya que son la raíz de toda miseria. La más elevada austeridad (tapas), el voto más exigente, es estabilizarse en el desapego. En esa austeridad hay que estar siempre alerta y esforzarse una y otra vez. Como un niño que se esfuerza por aprender a caminar, puede que den unos pasos, vacilen y caigan, pero como el niño, deben levantarse con una sonrisa y volver a empezar. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba (Prasanthi Vahini, capítulo 13 de la edición en inglés y capítulo 4 de la edición en español)
Mensaje del día 18 de Septiembre del 2021
La sabiduría (jnana) es la preciosa ambrosía recogida de todas las fuentes de conocimiento. Es la dulce y nutritiva mantequilla batida y recolectada de las escrituras. La sabiduría no es la capacidad de discriminar y declarar: "Esto es plano, esto es redondo", o "esto es una colina, una casa", etc. ¡Esto es conocimiento común! Luego, podemos tener buen conocimiento (sujnana), cuando uno distingue entre lo correcto y lo incorrecto, o lo bueno y lo malo, o cuando uno descubre que una determinada actividad es para el mejoramiento de uno y de los demás. ¡Tanto la sabiduría como el buen conocimiento están confinados al propio intelecto! Hay una sabiduría superior que es cuando el corazón es transformado por la lealtad a la verdad, a la no violencia y a la compasión. Una persona con esta sabiduría superior se comprende a sí misma y a su parentesco con el cosmos y su Creador. Vive de acuerdo con esa comprensión, sin dudas ni desarmonía. La referencia para medir la sabiduría superior es el dharma (rectitud). Cuanto más se practica el dharma, más se enraíza uno en la sabiduría superior. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Sathya Sai Vahini, capítulo 20)
Mensaje del día 17 de Septiembre del 2021
Cada persona es la causa de su buena o mala fortuna. Cada uno es el constructor, el arquitecto. La suerte, el destino, la predeterminación, la voluntad de Dios: todas estas explicaciones son derribadas por el principio del karma (consecuencias de las acciones pasadas). Dios y las personas solo pueden reconciliarse y afiliarse sobre la base de este principio del karma. Cuando uno se da cuenta de que Dios no causa el propio sufrimiento, que cada uno es la única causa, que no se puede culpar a ninguna otra persona y que uno es libre de forjar su futuro, entonces uno se acerca a Dios con paso más firme y con la mente más clara. Si una persona está afligida por la desgracia que vive en el presente, con seguridad es el resultado de sus actos anteriores. De la misma manera, uno tiene que creer que la felicidad y la buena fortuna también están en sus propias manos. Si uno lo decide, puede lograrlas. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba (Sathya Sai Vahini, capítulo 13)
Mensaje del día 16 de Septiembre del 2021
A medida que los siglos ruedan uno tras otro sobre la tierra, nuevos problemas aparecen, nuevas circunstancias y aprietos nos confrontan; luego, las leyes y los límites del pasado deben ser modificados por aquí y por allá. De hecho, tales ajustes son parte del diseño. Se debe mostrar a la gente el camino hacia el progreso espiritual bajo las nuevas circunstancias, de modo que el código de la ley, ajustado a la nueva era, se declare obligatorio. Sin embargo, debe tenerse en mente lo que sigue. El Atma-dharma (el dharma divino) enunciado en el Vedanta es eterno e inmutable. No se puede diluirlo ni acomodarlo a las necesidades del momento. La enseñanza perenne es esta: la fe en el Atma como el núcleo, la realidad y la meta, es válida para todos los tiempos. Las verdades del Atma-dharma están basadas en dos fundamentos eternos: el núcleo de la persona y la naturaleza (prakriti), siendo esta última la proyección de la voluntad divina. Por lo tanto, están más allá del alcance de los cambios. Son tan relevantes y tan válidas hoy como lo eran hace miles de años. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Sathya Sai Vahini. C.12. Versión en inglés)
Mensaje del día 15 de Septiembre del 2021
No se debe permitir a la mente que vague como le plazca. Debe ser controlada sin la más mínima ternura ni piedad. En lo posible, deberíamos apuntar incluso a su destrucción, para que evite el contacto con los objetos mundanos. ¿Por qué? Solo cuando se hace esto puedes comprender tu propia identidad. Tomar consciencia de esa realidad es el estado denominado liberación (mukti). Entonces terminan todos los problemas y tribulaciones, dudas y dilemas; superamos la pena, la ilusión y la ansiedad, y nos establecemos en la sagrada calma de la paz. Primero, renuncia a todos los impulsos impuros y cultiva los que sean puros. Luego procura, paso a paso, de renunciar también a estos últimos, y haz que la mente se quede sin propósito (nir-vishaya). La paz que se logra de este modo es refulgente, llena de bienaventuranza, y se asocia con la sabiduría; esto es por cierto, la experiencia de la Divinidad, de Dios mismo. El aspirante que anhela alcanzar esta paz debe practicar constantemente una vida virtuosa, sobreponiéndose a todos los obstáculos iniciales. Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. (Prasanthi Vahini, C. 12. Versión en inglés)
Anterior | pagina: 146 | Siguiente |